Por Rafael J. Jimenez Baralt
¿Alguna vez te has preguntado por qué muchos artistas de reguetón cambian la letra /R/ por la /L/? Cuando escuchamos a Bad Bunny decir «mi amoL,» es porque el cantante es puertoriqueño, aunque el origen de este fenómeno es bastante más incierto y apunta a que pueda ser andaluz o africano. El cambio de la /R/ por la /L/ en ciertos contextos es una característica destacada del español caribeño, especialmente de Puerto Rico. Sin embargo, los puertorriqueños no sustituyen la /R/ por la /L/ en todas las situaciones. Este fenómeno fonético, conocido como lambdacismo, se produce cuando se pronuncia la letra /L/ en lugar de la /R/, especificamente al final de una sílaba. Por esta razón, es frecuente escuchar a los reggaetoneros puertorriqueños decir «cuaLto» en lugar de «cuaRto,» o «mi amoL» en vez de «mi amoR.»
Pero ¿por qué ocurre esto? Al igual que existen diversas variantes del español, como el Castellano, el Rioplatense o el Andino, también emerge una variante caribeña, aunque los lingüistas no llegan a un acuerdo completo sobre qué países específicos hablan este dialecto. Algunos argumentan que parte de esta zona dialectal abarca las costas de Venezuela y Colombia, mientras que otros también incorporan a ciertas partes de centro América. Sin embargo, todos coinciden en que mayoritariamente se encuentra en el caribe insular, es decir, en Cuba, República Dominicana y Puerto Rico. A pesar de las posibles variaciones entre estos tres países, el origen del español caribeño es uno de los temas más debatidos entre los académicos y existen tres teorías principales.
Imagen: https://es.wikipedia.org/wiki/Espa%C3%B1ol_puertorrique%C3%B1o
La primera es la Teoría Andalucista, que sostiene que la variante hablada en las islas caribeñas refleja la influencia de los andaluces y canarios que colonizaron esta región, transmitiendo ciertas características del español de Andalucía al Caribe. Por ejemplo, el Seseo, que sería la pronunciación con «s» en lugar de /z/, como en «caza» pronunciado como «casa» en lugar de «caza.» La aspiración de la /s/ al final de sílabas o palabras, y la vocalización de la /r/ al final de sílaba, como en “vee-de” en lugar a “verde”. Bastante similar al Caribe, ¿no?
Por otro lado, está la Teoría Sustratitista, que argumenta que la influencia lingüística proviene de los esclavos africanos que llegaron al Caribe desde África a principios del siglo XVI. Se cree que la gran cantidad de esclavos que llegaron a trabajar en el sistema de plantaciones azucareras pudo haber influenciado en el habla caribeña. Muchas de las lenguas africanas carecen del sonido vibrante /R/, lo que sugiere que posiblemente se pronunciaba como /L/.
La tercera teoría es la Moderada, que combina estas dos influencias anteriores. En cualquier caso, no cabe duda que, en el Caribe, cuando una palabra o sílaba comienza con /R/, nunca se reemplaza con /L/. Solo se reemplaza cuando se encuentra a final de silaba. Por lo tanto, aunque podríamos escuchar a un cantante de reguetón decir «mi amoL,» nunca lo escucharíamos decir «mi coLazón».
Imagen: https://edition.cnn.com/travel/article/puerto-rico-travel-2022/index.html